Rajoy ha dado las máximas generales para luchar contra la crisis galopante que nos
consume.
1º Ley de estabilidad presupuestaria: Objetivo, reducir 16.500 millones en esta primera
legislatura. 2º Administración pública: Se congela la contratación de personal. 3º
Pensiones y jubilaciones: Revalorización de las pensiones que fueron congeladas por el
anterior gobierno. 4º nuevas fusiones.5º Reforma laboral. Esta será de máxima
prioridad. 6º Reformas energéticas. 7º Retrasar los IVA para las PYMES y bajar el
IRPF. 8º Un año más de bachillerato. 9º Justicia: reformas para conseguir independencia
y eficacia.10º Sanidad: Mantener la calidad y hacer frente al déficit.11º Agricultura: Se
crea un ministerio para competir con más eficacia en Europa. 12º Exteriores: Recuperar
la credibilidad en Bruselas y poder participar en las decisiones que se tomen en mercado
común como antes de zapatero. Es decir: recuperar el peso de decisión con que
contábamos en tiempos de Aznar.
Después de todo esto, el Señor Alfredo, el del dedo, dice que todo es una ambigüedad.
Por lo visto sigue sin enterarse. Una pena.
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Si tuviera algo que destacar del discurso de Rajoy en las cortes, a parte de lo expuesto
en la gota de tinta anterior, yo me quedaría con esta frase: “En mí legislatura no habrá
buenos y malos”. Aludiendo a la desafortunada diferenciación de ciudadanos que Peces
Barba hizo en la fiesta homenaje que barias viejas glorias del socialismo anhelante
dieron al ínclito Santiago Carrillo. El ejemplo y pilar básico de la bondad y la concordia
democrcrática viviente de la memoria histórica.
Siguen en el 36. ¡Angelitos!
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Me entero, con gran pesar, de la muerte de Kim Jong-II, el último dictador estalinista
que mantiene a su pueblo subyugado bajo el yugo comunista. Mi más sentido pésame a
Cayo Lara y a los Barden, Víctor Manuel y compañía. ¡Qué pena más grande señor! No
ganamos parta disgustos.
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Y Gallardón de ministro de justicia. Menuda le espera. ¿Será capaz de atrapar el faisán,
ganar al “campeón” de Pepiño blanco, o poner a Urdangarin y sus secuaces a la sombra?
¿Sabremos de una vez quien masacro a cientos de ciudadanos en el metro el 11-M?
Esperemos acontecimientos. Yo le doy un consejo: Señor Gallardón, si quiere
solucionar pronto estos asuntos, pregunte al juez Garzón, seguro que le allanará mucho
el camino.