De un tiempo a este momento no
hay día que no vaya a la cama con un mal sabor de boca y un malestar general
provocado por la confusión y perplejidad de las noticias que me llegan a través
de los medios de comunicación patrios.
Tal vez a mis años y con la
educación recibida en la que se premian los valores humanos y la ética moral me
vea superado por los acontecimientos políticos que se están sucediendo un día
tras otro. Será que no soy moderno y mi
moralidad ya no tenga vigencia en la época que vivimos. Pero díganme ustedes si
esto que les voy a contar no es para estar sorprendido.
Desde la llegada de esta casta
casposa y revanchista la política nacional se ha convertido en un vertedero de
mangantes indocumentados que con toda la caradura del mundo se han pegado al
cajón del pan del que disponen con total impunidad para su beneficio.
El nepotismo se contempla con
absoluta normalidad y no han dudado un solo día para ponerlo en boga. Manuela
Carmena enchufa a su sobrino político; Ada Colau ficha a su marido para
consejero del Ayuntamiento de Barcelona; la Consejera de Sanidad
balear, la socialista Patricia Gómez, coloca a su marido como Director del
Servicio de Salud; la alcaldesa de Guadarrama, Carmen María Pérez, con una
población de 13 mil habitantes, pretende cobrar un sueldo de 50 mil €, lo mismo
que la anciana alcaldesa de Madrid con una población de 3 millones; la
alcaldesa de Guadalcacín, una pedanía de Jerez, la socialista Nieves Mendoza,
con una población de 212 mil habitantes y una tasa media de paro del 41%,
quiere cobrar 38 mil € al año y no se la cae la cara de vergüenza, entre otras
cosas, porque no la tiene. ¿Pero no hay nadie que ponga a esta jarcia en su
sitio?
Así podríamos seguir y seguir y…
no pasa nada. La sensatez no existe y la justicia está desaparecida.
Pero lo que ya se sale de toda
cordura es el seudo terrorismo de Estado de los independentistas catalanes, esa
chusma llorona y ventajista que,
aprovechando la democracia que nos dimos
todos los españoles, queman banderas españolas, los retratos de los reyes y la Constitución que
avala nuestra convivencia en libertad. Y sin salir de mi perplejidad… no pasa nada.
Esta actitud pasota del Gobierno
de la Nación
ante estos gravísimos acontecimientos ha dado alas a los mediocres politiquillos
secesionista y a su entorno de mentecatos aldeanos. Así podemos ver a
una envalentonada Ada Colau retirando el busto del rey D. Juan Carlos I, pues,
al parecer, ella es republicana. Entonces, ¿que pinta usted en un país cuyo
estado político es una Monarquía Constituyente? Con buen criterio los diputados
del PP colocaron una fotografía del actual Jefe del Estado, D. Felipe VI. Ni
que decir tiene que la anticonstitucionalista alcaldesa “republicana” de Barcelona mandó descolgarlo
inmediatamente. Tal vez será mejor que coloque en ese lugar la fotografía de
Jordi Pujol y toda su mafiosa familia. Por cierto, otro que se ríe de la
justicia española y del populacho catalán que traga lo que les echen.
Como el atacar al rey sale
gratis, cada vez son más los que se apuntan
al insulto y el improperio. Ahora le toca el ”minuto de gloria” a Isabel
Duran, concejala podemita de la juventud en el Ayuntamiento de Alicante. Solo
con leer su presentación se hace uno a la idea de quien se trata: Soy, dice
“lesbiana, feminista, animalista”. ¿En que universidad se estudia eso? Porque
dicho por esta soez criatura parecen títulos académicos. Bien, pues este
personaje de dudosa prudencia,
discreción y cordura, también conocida
por “Maribel la roja”, se ha permitido llamar hijo puta al rey D. Juan Carlos I
y acusarle de haber asesinado a su hermano. Y…no pasa nada.
Señor Presidente del Gobierno, ¿qué
tienen que hacer todos estos descerebraos para que actúe la justicia y acabe con la impunidad con la que se mueven
sin orden ni concierto? ¿A que espera? ¿Tal vez a que lo preñen?
Díganme ahora, ¿esto es para
estar perplejo? ¿O soy yo el que esta fuera de razón?
Vivir para ver.