lunes, 7 de enero de 2019

No se puede ser más patético.


Lo que lleva de presidente el bello okupa  es de vergüenza ajena. Si alguien tenía dudas, ahora han quedado resueltas con sus vergonzosas actuaciones que en cualquier país europeo le habrían llevado a la dimisión y el ostracismo más absoluto para el resto de su vida política.
Repasemos alguna: Comenzó con mal pie con la elección de algunas ministras y ministros, como hablan ahora  estos mentecatos literarios,  que debieron dimitir por implicados en asuntos poco claros y aún  tiene en su gobierno políticas  y políticos, como la ministra Dolores Delgado o el astronauta Pedro Duque, por problemas comprometedores que aún no han sido purgados.
La tesis doctoral de corta y pega que avergüenza a todo el estado español excepto al botarate okupa de la presidencia. Es bochornosa, para España, ser representada en el mundo por un presidente  tan frescales como este, un fulano de esta condición  tan macarra  que, ya de entrada, hace desconfiar de su ineptitud y desahogo. Más viendo sus bochornosas actuaciones. ¿Qué puede pensar de él las personas serias de la política mundial? ¿Quien se puede fiar de semejante informal, que unos días dice una cosa y al siguiente la contraria? Con lo que pierde lo más importante para un político, la credibilidad ante el resto de naciones y el ridículo que hace nuestro país con semejante representación.
Lo que más representa su condición de baja moral y muerto de hambre, es la afición oculta a los aviones y helicópteros, a tanto llega la petulancia y narcisismo de este creído y egoísta, felón.
Sigamos con su nefasto historial. Lo que de momento le trae al traste e interrumpe sus pomposas vanidades, es la exhumación del Generalísimo Franco. Tiene que reconocer que el general es mucho para un engreído fantasma como usted cuyas fabulaciones se escapan de la realidad, Franco ganó la guerra, y usted solo es guapo, pero con una belleza que puede llegar a cansar de tan vista. Tiene una cara que aburre, aunque dura como el granito.
Estoy por pensar que antes se va usted del usurpado gobierno, jamás ha ganado nada, que Franco abandone su descanso eterno. Al tiempo.

Lo que en verdad le pone es ser rey. Lo demostró el día en el que, el verdadero rey de España, les concedió una recepción con motivo de la Navidad. Usted se propuso colocarse al lado de su majestad para seguir saludando de igual a igual a los invitados del evento; o en los viajes a Cuba; u otros lugares a los que llevó a su señora, queriendo hacerla lucir como a la reina Leticia. Es usted un  petulante peligroso. Por último, para confirmar todo lo dicho anteriormente, en su locura  asnina, se reúne con el golpista  fascista Torra para venderle España con tal de mantenerse en La Moncloa unos meses más y poder seguir disfrutando del avión y los palacios, al menos, estas navidades, que sin duda, y para bien de este maltratado país, serán las últimas. Pero antes de marcharse deja su firma de traidor y descerebrado en todo lo alto. Esto también dice mucho de los miserables políticos de la oposición que no tienen valor para acabar con esta farsa. Es usted un engreído muerto de hambre a quien, incomprensiblemente, no le ha votado nadie, y actúa como sus socios  criminales y antiespañoles. Un fraude con aires de grandeza. Vamos, un mamarracho  peligroso.                                                             

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