Como estamos en verano es normal que hagamos homenajes a “tutti place” y
es tanta la morbosidad y consideración que los vascos tienen, por sus asesinos
preferidos, sus héroes terroristas, que se han puesto al asunto con pasión
inusitada, además alentada por el ejemplo más virtuoso de los asesinos etarras
de la historia del descarado y patético Euskadi, el Otegi, criminal blanqueado
por el PSOE del bello Pedro, queriendo hacernos creer que gracias a los muertos
puestos en esta insólita democracia podemos vivir en paz, o lo que sea esto que
tenemos. De momento ya han homenajeado al carcelero mayor “Aldo” y el siniestro
jefe Otegi advierte, con la chulería que caracteriza a estos magnicidas,
que aún quedan por salir 250 presos de
ETA, a los que les espera el consiguiente agasajo.
Mientras llegan estos próximos respetos, se esta procesando al etarra “Alt”,
por la “nimiedad” de haberle descerrajado unos tiros que le causaron la muerte
al senador Jiménez Alda en 2001.
A este esperemos que le tarde el homenaje, aunque siempre
le puede esperar la amnistía, que esta el “presi” en funcione muy suelto en
estoa días.
Lo que no acabo de entender es porque no se recuerda con respeto y
humanidad a los que estos “héroes vascos” mataron por el mero hecho de ser inocentes
y no pensar como ellos. Además aunque fueran perdonados por morir asesinados,
no volverían a la vida. Yo no lo veo justo, aunque por no pensar lo mismo que
los asesinos estos me llamen fascista. Palabra clave para estas acémilas
bestias. Solo puedo entender la vergüenza que pasaran los vacos de buen corazón,
cuando vean estas manifestaciones miserables.
Como va a funcionar una democracia
si permite estas aberraciones sociales. Pobre España, tantos muertos para esto.
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