Hace unos años, cuando Ana Botella
era alcaldesa de Madrid, se le oyó decir al ahora vicepresidente de este
“moderno gobierno”, criticar a Ana Botella diciendo, que era alcaldesa de Madrid por ser la esposa de quien era, y
eso es lo más vergonzoso y fascista que le puede pasar al presidente de una
Nación.
Ahora resulta que su mujer ostenta un cargo público
en el gobierno del que el es vicepresidente, y resulta que ya no es fascista ni
machista que una mujer desarrolle un cargo y se la critique por el mero hecho
de ser mujer. o sea que solo las mujeres de
izquierdas pueden ostentar cargos de responsabilidad en la administración. Ahora son los que critiquen
esta situación de la ministra Irene Montero, los fascistas y machista.
“Señor” Pablo es usted un
indigno y mentiroso vicepresidente. Un mierda y arrastrado político, un
mamarracho que solo busca enriquecerse a costa de los pobres ignorantes de los
que saca los votos para conseguir estar en un lugar, que usted convierte en
basura, para pagar lo que le falta pagar
de su mansión. Si esto no se remedia pronto dejaran España como un solar. Las
pensiones se endurecen sin consideración y los pobres en un par de años serán
miles, será el momento de echar la culpa a la derecha, como siempre actúa, la
mentirosa e incapaz, izquierda. Solo pensando en su propio beneficio, España
que la arregle otro.
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