domingo, 18 de octubre de 2015

La novedad.

Si hay algo que atraiga con mayor vehemencia al ser humano, eso es lo nuevo.
Es esa atracción por lo desconocido lo que ha movido al hombre en todos los tiempos.
El ansia por vivir mejor ha llevado a la humanidad a probar varios sistemas de sociedad que le han hecho conocer todo tipo de experiencias. Unas buena, otras regulares y por supuesto malas y horribles. Pero si no hubiera sido así ahora estaríamos aún en los tiempos de las cavernas.
Lo nuevo siempre es bueno, si en verdad es nuevo y no se trata de viejas utopías recicladas y tuneadas para engañar al iluso ignorante al que se le vende la burra de novedad por algo viejo y que se ha demostrado, en otros tiempos, inservible.
Ahora ha irrumpido en el ruedo político nacional dos nuevos partidos. Uno, Ciudadanos, que no se sabe bien si es de centro derecha, de centro izquierda o un grupo de ciudadanos que anda pululando en el espectro político entre Pinto y Valdemoro, con buenas palabras y pocos hechos, cuyo discurso, si lo analizan detenidamente, no dice nada en concreto. Lo único que se entiende es que no va a gobernar con unos, PP, y no sabe si lo hará con los otros, PSOE, pero si no, ya verá. O sea, que pide a sus votantes un acto de fe como si de una religión se tratara. Una ambigüedad que quiere contentar a todos sin mojarse un dedo. Así quieren llegar al poder, una vez en él ya verán.
Hay una segunda novedad en el espectro político, Podemos. Este  no es un partido nuevo. Este está tuneado y disfrazado de demócrata para engañar al tonto o dejarse querer por el listillo de turno que busca la forma de vivir a la sopa boba a la sombra de sus siglas. Éste es un partido de extrema izquierda, con ideas trasnochadas que solo funciona bien en los países tercermundistas, a los que el grupo de poder arruina y mata a hambre mientras  ellos se enriquecen. Estos dirigentes, como aquellos, son un grupo de mamarrachos, la mayoría sin formación académica alguna con la lección marxista bien aprendida. Se les ve las novedades que traen cuando llegan al poder. Estos ya lo ostentan en algunos Ayuntamientos y se les ha visto el plumero al otro día de tomar posesión de su cargo. Primer paso: enchufar a familiares y amigos para proporcionarles un buen sueldo. Y esto es todo. Atrás quedan olvidadas, gracias a Dios, todas las propuestas “mágicas” resucitadas del nefasto socialismo marxista leninista  y otras ideas peregrinas como poner a barrer a los estudiantes, esto ya lo hizo Mao en su momento, poner huertecitos para que los cultiven los parias que les voten, o poner a vivir a sus seguidores en edificios de propiedad privada o pública. Los ocupas.
Lo nuevo ya está al descubierto y ha resultado ser un tremendo fiasco. En esta ocasión la novedad ha resultado ser el viejo proyecto macabro, rencoroso y criminal de tiempos pasados disfrazado de democracia, libertad e igualdad. Tres formas de vida que estos mentirosos jamás han proporcionado a la humanidad. Todo  lo  contrario, muerte miseria y desolación.
Que nadie se engañe cuando introduzca la papeleta en la urna.


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