Moción de censura en Torrelavega. Tomadura de pelo al ciudadano

La cacicada se consumó. Por fin la moción de censura presentada por, Doña Lidia Ruiz Salmón y D. Pedro García Carmona, ha dejado a D. Ildefonso Calderón al fresco de la oposición.

No es que el señor Calderón fuera un dechado de virtudes políticas. Que su gestión municipal hasta el momento, se caracterice por la imaginación, la lucidez, o la espectacularidad de sus obras. Podemos, incluso, criticar su escasa gestión ante el Gobierno de Cantabria y su sumisión, en algunos momentos, al Presidente, Sr. Diego. Pero aún así, con los escasos recursos municipales, poco más se hubiera podido hacer.

Claro está, que yo ni soy político ni tengo la clarividencia  de doña Lidia. O la sagacidad de don Pedro.

Estas virtudes, solo reservadas a los más escogidos paladines, son las que diferencian al líder del resto de los contribuyentes, a los que llaman ciudadanos.

Los argumentos aducidos para  tomar esta decisión son de lo más banal. Lidia Ruiz asegura que “es lo que Torrelavega necesita para seguir adelante”. Clarividencia pura y dura. Y el señor Carmona aboga por traer a Torrelavega, políticas en positivo y nuevos puntos de partida ilusionantes. Sagacidad incontestable. Pero lo que no dicen, porque no saben, cuales son los caminos para seguir  adelante, o qué  y cuales son esas políticas positivas que tanto ilusionan.

Dejémonos de andar por las ramas, digamos claro cual es el motivo principal de esta movida que no lleva a ninguna parte; Señorita Lidia, el sillón municipal y el sueldecito, que de algo hay que vivir. Señor D. Pedro, tal vez a usted no le pueda la parte económica, pues es un buen profesional y con su trabajo, fuera de la política, tiene garantizado el  estipendio, pero le pierde la fotografía social.

Como pueden ver, sus votantes, entre los que me incluyo con vergüenza, no son tan tontos como ustedes creen. Y quien más quien menos, les tenemos tomado el pulso. Por eso es ahora cuando viene lo peor. Si ustedes, en el tiempo de legislatura que les queda

No han valorado bien las consecuencias que esta cacicada, del quítate tú para ponerme yo, pueda traerles. Al tiempo.

no llevan a cabo ninguno de los proyectos que exigían al anterior alcalde: ¿Serán capaces de volverse a presentar a las elecciones? O por el contrario, su partido en un gesto de coherencia les mandará a galeras.